Usa las mejores herramientas de Cash flow, retrasa los pagos y adelanta los coros para mejorar al cash flow o flujo de caja de tu empresa.
¿Tienes tu propio negocio y te gustaría gestionar los cobros y los gastos sin que se te escape ningún detalle? Entonces uno de los conceptos esenciales que tienes que conocer para comprender correctamente la situación económica de la empresa es el flujo de caja. También se denomina cash flow y lo utilizamos para hacer referencia al flujo de entrada y salida de dinero efectivo de una empresa en una etapa determinada. Dar salida al inventario antiguo o calcular bien tus ciclos comerciales sirven para optimizar y mejorar el cashflow de la empresa. A continuación puedes averiguar otros tips para obtener mayor liquidez en tu negocio. ¡No te los pierdas!
La definición de cash flow podría limitarse a la diferencia entre los cobros y los pagos. En otras palabras el cash flow, es un activo que evalúa la liquidez y el estado financiero de la rentabilidad mostrando la acumulación neta de activos líquidos. Básicamente puede evaluarse la viabilidad de un negocio y de su inversión, medir el crecimiento, o detectar si existe algún problema de liquidez. Por lo tanto, nos indicará cuándo es necesario solicitar financiación o si el flujo de la caja puede hacer frente a los pagos imprevistos.
La fórmula para calcular el cash flow responde a:
Cash Flow = Beneficio + Amortizaciones + Provisiones
¿Tienes una startup o una pyme? Para mejorar la capacidad financiera de tu empresa da igual el tamaño, puedes poner en práctica una serie de consejos y estrategias que te asegurarán que entra más dinero del que sale, lee y presta especial atención:
Antes de tomar una decisión acerca de tus finanzas o realizar cualquier acción que implique el flujo de caja debes comprender de dónde salen cada uno de los datos y números de la empresa. Cuando se realizan los pagos de los proveedores, el periodo medio del cobro de los clientes, el ticket medio por cliente, los costes fijos…. Se trata de dibujar a grandes rasgos un proyecto de gestión de la caja profesional y efectivo.
Elabora presupuestos previos a las compras de proveedores y de otros gastos que genere la empresa, limitando los gastos y marcando prioridades puedes asignar una cantidad de dinero a cada una de ellas sin excederte. Al tener un listado enumerando las prioridades será mucho más sencillo saber cuáles son los gastos en los que tienes que apretarte el cinturón y cuáles pueden esperar.
Si ofreces descuentos y ofertas con un valor añadido seguro que puedes incentivar a tus clientes que te compren de nuevo fidelizándolos y por otro lado captando potenciales clientes.
Aunque ofrezcas facilidades a tus clientes para pagar, es básico que te asegures de que estos paguen dentro de unos plazos para que tu cash flow sea positivo.
En toda compra y en toda venta hay unos tiempos de procesamiento y de transacción. Por ello, otro consejo que puede ayudarte a mejorar el flujo de caja de la empresa es negociar y conseguir unas buenas condiciones de la mano de tus proveedores.
Aunque sea complicado, siempre tienes que destinar una mínima cantidad para ahorrar cada mes.
Si ajustas periódicamente la rotación del inventario para evitar invertir demasiado en esta parte puedes obtener una cantidad elevada de dinero para destinar a otras partidas. Esto implica controlar el stock y verificar periódicamente el inventario para buscar los productos vencidos o antiguos y evitar hacer pedidos hasta hacer circular los existentes. Puedes plantear ofertas y descuentos para liquidar el viejo inventario y conseguir así que entre dinero efectivo en la caja. Para esta gestión existen una serie de soluciones para administrar el inventario y mejorar la salida de los mismos.
El factoring es una vía de financiación que puedes mediante la cual una entidad bancaria compra tus facturas impagadas y te ofrece el efectivo por adelantado, con un interés. Esta opción es mejor que los créditos tradicionales, pero debes estudiarlo previamente.
De la mano de la tecnología puedes contar con diferentes apps o softwares que pueden optimizar la gestión de la tesorería. Holded, Factusol, Debitoor, Anfix o Quipu son algunas de las opciones más conocidas.
En caso de contar con ofertas o descuentos de los proveedores no lo dudes, y no dejes pasar la oportunidad de obtener un ahorro considerable en tus pagos. Por ejemplo: puedes utilizar los descuento por pago adelantado.
Si trabajas con varios proveedores puedes obtener unos precios más competitivos valorando lo que cada uno te aporta y en qué puntos son más fuertes.
Si la naturaleza de tu negocio conlleva que tengas que invertir una gran cantidad de dinero en material para desarrollar todas las tareas necesarias, puedes comprar parte y alquilar otra parte pensando en opciones como el renting o el leasing que pueden ser muy interesantes.
Antes de tomar cualquier decisión es importante que hagas números y compruebes que por ejemplo; los descuentos de pago por adelantado te aportan un beneficio, o que la estrategia del factoring en tu caso es mejor que la de un crédito. Realiza un seguimiento de cada una de las necesidades de tu flujo de caja.
No olvides que buena gestión del movimiento de dinero del negocio supone uno de los pilares más fuertes para construir una empresa sólida, estable y de continuo crecimiento.
Desirée Puchades